Necesito descansar y desconectar sin dejar de trabajar en Els 7 colors de la Bet.
Ahora estoy bien, en paz y tranquila conmigo misma y con mi entorno, pero he sufrido mucho hasta llegar aquí. Durante el confinamiento todo fueron contratiempos, zancadillas y mucho, mucho estrés.
Si hay algo que he aprendido de esta situación tan extraña es a no forzarte en ser más ambiciosa ni productiva. Creo que ir en contra de cómo te sientes es precisamente lo que te lastra. Hacer lo que se supone que se tiene que hacer implica entrar en el terreno de la odiosa comparación.
¿Recuerdas qué se llevaba hacer durante el confinamiento? "ocupar" el tiempo confinada haciendo cosas, siendo productiva (ahora me apunto a este curso, luego a este otro, hago un pan de espelta, otro de multicereales,...) Me agobié. Intentaba seguir un ritmo que NO era mío y no podía (más que nada porque la carga laboral se duplicó)
Es un error compararte con el resto que no para de "hacer cosas" porque ellos no son tú. Si tu cuerpo te pide descansar, permítetelo. ¿Y sabes una cosa? No eres ni mejor ni peor persona por no ser "productiva". Tampoco eres la única, lo que pasa es que no queda bien reconocer la propia vulnerabilidad. Por eso me gustó tanto encontrar este vídeo de Fran Meneses (una ilustradora chilena afincada en NY) que confesaba abiertamente perdonadme por no ser productiva pero no estoy bien. Me sentí tan identificada...
Repito, no pasa nada, está bien no estar on fire como el resto de la humanidad.